jueves, junio 26, 2008

HULK, REGRESO A LOS 70

THE INCREDIBLE HULK (EE.UU., 2008)

Director: Louis Leterrier
Intérpretes: Edward Norton (Bruce Banner), Tim Roth (Emil Blonsky), William Hurt (General Ross), Liv Tyler (Betty Ross), Tim Blake Nelson (Samuel Sanders), Lou Ferrigno (voz de Hulk)
Duración: 115 minutos
Estreno en España: 20 de junio
Calificación: 6,25 /10
Sinopsis: ¡Hulk aplasta!

Después de salir de ver Hulk, poco más y me hace falta una máquina del tiempo para volver al siglo XXI. Los estampados chillones de los sofás, espantosos jerseys y sudaderas, mastodóntica maquinaria científica y el tufo a serie de televisión clásica me transportaron de vuelta a los 70, década en la que, supuestamente, no está ambientada la película. Sólo me faltó ver a Hulk con pantalones de campana y destruyendo coches a ritmo de los Bee Gees.

Flojita, visible y sin pajas mentales
Olvidaos de los cómics y de la anterior película y sus complejidades freudianas, éste el Hulk de la tele, sustituyendo a Bill Bixby por Edward Norton. ¿Cómo revivir la franquicia?, debieron pensar en Marvel. Pues recurriendo a la imagen del Goliath Verde que anida en el imaginario colectivo. ¿El Hulk de la tele? ¡Sí! Ese tipo solitario de buen corazón que hace autostop y repite frecuentemente eso de “No le gustaría verme enfadado”.

Así que volvemos a tener a un Bruce Banner fugitivo, magnificamente encarnado por Edward Norton, perseguido por el Ejército y en busca de la cura para librarse de su otro yo a base de plantas exóticas y tratamientos experimentales. Pero vamos por partes.

La película SÍ ES UNA SECUELA, ya que arranca donde acabó el filme de Ang Lee, con Banner huido a Latinoamérica. En el prólogo nos cuentan el origen de Hulk (un poco modificado respecto a la película de Lee) a modo de flashback –como en una serie de televisión, con las clásicas portadas de periódicos- y la acción salta a Brasil, donde Banner lleva una vida discreta en una favela, trabajando en una fábrica, aprendiendo a controlar su ira con técnicas de meditación-

Esos primeros 25 minutos son lo mejor de la película, porque no desprenden el olor a naftalina de una chaqueta de pana que lleva 30 años metida en el armario. Por ser frescos, diferentes y los únicos en tener algún personaje secundario medio decente, además de una ambientación de este siglo. Lamentablemente, después todo se va al garete. Al estilo del Brand New Day spidermaniano, Marvel retrotrae a Hulk a los 70 en busca del público que hace mucho dejó al personaje. Una lástima. Pudo haber sido bonito.

El perfecto Bruce Banner
Edward Norton cumple sobradamente como Banner y muestra de forma solvente en pantalla su lucha interior con el gigante verde, su carácter torturado y sus intentos por pasar desapercibido y no meterse en broncas. Es también uno de los pocos personaje con buenos diálogos, que declama con naturalidad. Por poner algún pero, cuando Norton se transforma en Hulk, no conserva el (relativo) parecido facial que tenía Eric Bana con su alter ego en la primera película. Más bien es el Hulk de Mike Deodato Jr., con un aire a Evo Morales en las distancias cortas (no fumé nada antes de la película, lo juro).

El monstruo esmeralda no acaba de encajar del todo contrapuesto a la imagen real, por su textura tipo Shrek. Hay escenas en las que se nota mucho que se trata de CGI y pantalla verde, como cuando los militares disparan a Hulk y éste se cubre. Por lo demás, mucho rugido al viento, dientes apretados y un estilo de combate que echa mano de todo lo que hay a su alrededor y hace bueno los dichos “a falta de tanques, buenos son helicópteros” y "quien a buen coche se arrima, buen arma improvisada se fabrica".

William Hurt, aunque un poco forzado y sobreiconizado en algunas escenas, compone un buen general Ross, con puro y todo; Liv Tyler como Betty Ross, hace de chica que solo sirve para ser tierna, salvable y rabiosa cuando hieren a alguien que ama; Tim Roth, flojito al principio y más entonado cuando se va convirtiendo en la Abominación; T.B. Nelson, genial, charlatán, con tan buenos diálogos y tan natural como Norton. De "Leonard" mejor no hablo, salvo que la Mención Especial al Jersey más Horrible y al Triángulo Amoroso Fallido es para él.

Falta de personalidad
El pecado mortal de la película es que no tiene personalidad, lo que la convierte en un telefilm de lujo al que salva el buen hacer de algunos actores y el amor que profesamos a Hulk después de 40 años de viñetas y “¡Hulk aplasta!”. La labor del director Louis Leterrier se reduce a la de un “mandao” al que le han dicho: “Anda, monín, ve y tráenos de vuelta la serie aquella de la musiquilla triste”. Y él, obediente, sirve en bandeja de plata un telefilm recalentado.

Sobre el guión, decir que si éste fuera el bolsillo de un pantalón, se le caerían unas cuantas monedas por más de un agujero. Pero vaya, tampoco es que importe. El esquema narrativo no es que guarde muchas sorpresas, sabes que la película va de A a C y que tiene que pasar por B (al menos Iron Man disimulaba un poco más, a pesar de ir por un camino parecido). Además, ya nos lo contaron todo en el trailer. Ya sabemos que Bruce Banner se tira de un avión, que el malo es muy feo y que Hulk salta a través de unos cristales para salir al jardín a jugar con los soldaditos.

El argumento de muchos frente a esto supongo que será decir “Pero si ésta es una película de ostias, yo voy al cine a ver al Hulk ponerse ‘to loco, chaval’, y repartir galletas”. Pues te vas a tener que tragar un montón de sensiblerías y caritas compungidas generadas por ordenador de tu verdoso héroe hasta la pelea “buena”, chato. Y aun así, además de unos cuantos puñetazos épicos de esos que hacen atravesar edificios y Hulk saltando para subir a los edificios, no vas a ver nada del otro jueves.
Los guiños frikis
Hay un cameo de Stan Lee, por supuesto, un poco menos ridículo e intrascendente de lo habitual, con su habitual punto divertido. Y tampoco podía faltar una broma a costa de SPOILER los clásicos pantalones morados FIN SPOILER ni el cameo de Lou "Yo era Hulk" Ferrigno.
Además, SPOILER, el logo de SHIELD anda por ahí, está presente la comunicación entre "Mr. Green" y "Mr. Blue" de la etapa de Bruce Jones, (Incredible Hulk v.2 34 a 76) y ¡el suero del Súper Soldado como origen del meollo!, lo que confirma que Marvel teje su telaraña y prepara el terreno para sus próximos proyectos FIN SPOILER. Y ya sabéis que al final de la película aparece SPOILER Tony Stark (Robert Downey Jr.), diciéndole al general Ross "estamos reuniendo un equipo", con lo que tenemos, que yo sepa, el primer crossover Marvel en el cine FIN SPOILER.
De la etapa de Bruce Jones –mencionado en uno de los spoilers- también aparecen las técnicas de relajación y el metrónomo que usa Banner para controlar su ritmo cardiaco. En la muñeca lleva un pulsómetro que le indica cuando se está poniendo “to loco, chaval”. Se incluye también una escena de sexo apta para menores con chiste fácil a costa del tema. Bruce, por cierto, usa el nombre de David Banner –el nombre del protagonista de, sí, otra vez, ¡la serie de los 70!- en una carta.

¿Habrá secuela?
Sí. El nuevo villano tiene su génesis hacia los tres cuartos del metraje y es uno de los personajes más trabajados, al que se le entiende perfectamente su motivación, y cuyos cambios físicos -es lo que tiene estar cerca de Hulk, - empiezan a manifestarse. El leit motiv de los dos primeros villanos de Hulk –la Abominación y ése que estáis pensando para la secuela- es el opuesto al de Banner: abrazan el poder que da la radiación gamma en lugar de intentar librarse de él. O sea, lo mismito que Iron Man/Iron Monger en la reciente película del primero. Por si la indicación de un nuevo villano fuera poco, el final de la película insinúa un cambio en la relación Banner/Hulk que servirá para plantear un nuevo status quo, parece.

¿Deberíais ir a ver Hulk al cine? Para ser justo, la película es entretenida, no se hace larga gracias a su ritmo y tiene unas cuantas perlas. Me quedo con el enfrentamiento de Hulk contra los cañones “especiales” del Ejército, la provocación de Blonsky a Banner para que pierda el control y, sobre todo, el intento de cura, donde se puede ver la transformación paso a paso como sólo los efectos especiales de hoy permiten. Ahora, hay un par de escenitas con Liv Tyler que dan vergüenza ajena y el encono personal Banner-“Trueno” Ross se siente poco cocinado en las distancias cortas.

Otro punto a favor, para los que paséis de los 30, es que os acordaréis de la serie y la estética de los cómics de la época y no os preocupará tanto el aspecto retro y low tech del conjunto. Porque lo único moderno que aparece son las armas del equipo de elite dirigido por Blonsky y algo de tecnología militar. Pero si estáis pensando en ir al cine por lo impresionante que será sentir los puñetazos de Hulk con el Dolby Surround y la megapantalla... pues desde ya os digo que no es para tanto.

LO MEJOR Los primeros 25 minutos en Brasil, Edward Norton como Bruce Banner y T.B. Nelson.

LO PEOR Liv Tyler y la falta de personalidad de un film que es poco más que un plato recalentado.

LAS FRASES
-(Un soldado a Blonsky) "¿Cómo te sientes, tío?" (Blonsky) "Como un monstruo"
-(“Trueno” Ross, sobre los gustos de su hija, tras conocer a “Leonard”): ¿Dónde encontrará a esos tipos?

ÚLTIMO (Y ESTÚPIDO) APUNTE ¡Sale Rick Jones! Lamentablemente, en los títulos de crédito y como co-responsable de transporte o algo parecido, nada que ver con nuestro entrañable y eterno “wannabe”.

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