lunes, mayo 28, 2007

La Edad Dorada del Rol en Getxo (I): Hobbies Guinea

Recuerdo tener la nariz pegada al cristal porque era domingo al mediodía y la tienda, pintada de verde, estaba cerrada. Al otro lado relucían coloridos los dados de ocho, diez, doce y veinte caras. Rubí gastado, azul turquesa, verde esmeralda... ¡las joyas de la corona! En el escaparate también había un tablero de Heroquest, entonces una novedad. Por la ventana de atrás se veía la capilla dedicada a las figuras de plomo. Mi primera tienda de rol.

Finales de los 80. Hobbies Guinea estuvo muchos años en una preciosa casa de tejado puntiagudo (creo) construida en los 40 (creo), en la avenida Basagoiti de Algorta, un paseo peatonal que descendía en cuesta para luego volver a subir, desde el que se puede divisar el mar. Nos la descubrió un chico con el que fuimos a echar una partida, y fue como llegar a Rivendel. Epifanía.

A la izquierda estaba la parte de maquetas y dioramas, con barcos de guerra, aviones de combate... Detrás del mostrador de la derecha, bajo cuyo cristal había una inundación de dados, estaba el sinfín de manuales y suplementos de rol. En las estanterías más cercanas, los publicados en castellano y más arriba, los que estaban en inglés. Entre ambas mitades de la tienda, una pequeña escalera de caracol subía al segundo piso. Al laboratorio secreto, supongo.

El dueño era Carlos, de apariencia seria, cabello escaso, mediana edad, conversación solemne y entretenida, muy aficionado a las maquetas y miniaturas. Un tipo agradable. Solía darte bastante información de todo lo que iba a salir en América, Reino Unido y España, y enseñarte suplementos que dudosamente algún día podría ver uno en castellano. Traía un montón de material en inglés. Esa fue mi razón para, a los 11, 12 años, ponerme a aprender inglés: descifrar los hechizos contenidos en los montones de grimorios. Ni buscar trabajo ni leches: ¡rol!

Creo que lo primero que compré fue una revista, Troll, el número 24, que traía una lista exhaustiva de todo los juegos de rol. Antes, el sólo hecho de que pudiera existir una revista de rol ni se me había pasado por la cabeza. 275 pesetas, creo que costaba. Muy delgadita, muy informal, casi un fanzine con tapas de cartón, pero la puerta al rol en los tiempos sin Internet. Luego llegó la Líder, pero de eso hablamos otro día.

No me equivoco si digo que, “por culpa” de Hobbies Guinea, Getxo, un municipio de 84.000 habitantes, cinco barrios y calificado de pudiente, fue una de las zonas con más actividad rolera del País Vasco. Quizás porque la tienda se situaba céntrica junto a una plaza donde jugaban los niños y con un vistoso escaparate que picó la curiosidad a más de uno. Y porque Carlos, que era buen vendedor y además apasionado de lo suyo, sabía meterte el gusanillo y descubrirte nuevos mundos. En cierta ocasión le hice una entrevista para una revista local, como parte de un reportaje sobre rol. Un día de estos la subo, que ahora la tengo a un océano de distancia.

Prácticamente todos mis regalos de navidad venían de ahí. Los compraba yo mismo unos días antes (no me imagino a mi padre pidiendo, no sé, "La Maldición de los Cthonians") y se los daba a mis padres para que los escondieran, aunque siempre los olisqueaba y acudía al armario a hojearlos discretamente hasta el advenimiento papanoeliano del 24 de diciembre.

Con los años decreció la afición por el rol y la tienda fue mudando más al modelismo, que es a lo que se dedica hoy íntegramente, aunque hace tiempo que no paso por ahí. Supongo que todo fue por el auge de los juegos de cartas post Magic, la llegada de las consolas, el relevo generacional rolero no fue el esperado. Yo también me fui a viajar, como los aventureros, en busca de experiencia y fortuna, y mis visitas se convirtieron en más que esporádicas. La tienda se cambió de sitio, subió como unos 200 metros la cuesta, hacia atrás, en el 32 de la misma calle, junto al mirador de Maria Cristina que domina el mar Cantábrico. Y allí sigue, como si fuera la atemporal librería de Karl Konrad Koreander.

Desde aquí, desde México, un saludo.

1 comentario:

Luis Ed(Agramar) dijo...

Grandes recuerdos me trae a mi también esa tienda...allí comenzó todo!
Saludos desde el Descanso del Escriba
de otro getxotarra emigrado,rolero,wargamero y mas friki que Dios!